Aprobada por el ministerio de educación provincial, lleva el N° 1047 y pertenece a su vez a una fundación llamada “Micelio”. Luján (la creadora de esta idea) junto a su familia, cuenta que hace más de 3 años se viene gestando primero la bioconstrucción de la casa en forma de “Hongo” donde funciona la escuela y luego talleres, actividades variadas realizadas en comunidad, respondiendo a necesidades de las familias que se acercan.
Brindan talleres de violín, de cocina consciente, de gestión emocional, de yoga, entre tantos más, además tienen caballos en la chacra como para realizar actividades de índole terapéutica con ellos.
Si querés informarte más acerca de este gran cambio en la educación y hasta poder averiguar para inscribir a las infancias que te rodean, te recomendados que escuches el siguiente audio:
Reproductor de audio