En diálogo con FM Bahía Engaño, Nélson Bovcon, doctor en Biología confirmó que el pez espada hallado varado en Puerto Lobos, era un ejemplar adulto de mas de cuatro metros, hembra y que es una rareza para estas latitudes por tratarse de un animal que vive en aguas mucho más cálidas,
El profesional fue el encargado de realizar la autopsia del ejemplar que fue hallado el pasado viernes y fue retirado el sábado por la mañana, detallo.
“Fue una gran sorpresa, no pensábamos que iba a tener semejante tamaño”, comentó el especialista detallando que el ejemplar fue encontrado en la zona conocida como “Cantera de los Portugueses” por José Galeano un trabajador del lugar que “dio aviso y lo sacó con una máquina para que no se lo lleve la marea”, precisó.
Bovcon también explicó que tras realizar las primeras pericias se pudo determinar que era una hembra adulta, “de una talla muy grande” que medía unos 4,10 metros.
De igual manera, indicó que durante la autopsia no encontraron “nada que pueda determinar la causa de la muerte” y dijo que “es muy difícil determinarlo” y que análisis más detallados son “muy costosos”.
“Lo que sí sabemos es que estuvo comiendo hasta hace muy poco porque encontramos espinas de bagre que son ejemplares de la zona costera en su contenido estomacal”, mencionó el especialista datando la muerte aproximadamente 48 horas antes de ser encontrado en la costa.
Asimismo, señaló que según nuestros cálculos pesaba entre 350 y 380 kilos “pero nos parece que nos quedamos cortos”, dijo entre risas.
Al ser consultado sobre el largo hocico en forma de espada del animal, el biólogo explicó que es de “hueso y forma parte del cráneo del pez” y que en este caso media más de 150 centímetros.
Respecto a la incidencia del cambio climático en la aparición de estos animales que son característicos del clima tropical comentó que “no hay evidencias oceanográficas para decir que el incremento de la temperatura del mar lo haya atraído a la zona”, pero que “cada vez hay más registros de animales tropicales capturados en la Patagonia”.
FUENTES: propias y diario Jornada