El pasado viernes al mediodía en la sede del Concejo Deliberante de Rawson, los hijos de Irma Ester Conrad recibieron de manos de los concejales copia de la ordenanza 8894, por la cual el cuerpo de ediles le asigna el nombre de su señora madre, a una calle de la capital chubutense.

La ceremonia tuvo un tono emotivo y fue encabezada por el presidente del Concejo, Dulio Monti acompañado de la concejal Norma Medina -que llevo adelante la iniciativa de impulsar la asignación de dicho nombre- junto a las ediles Paula López, Gladis Poblete y Juan Flores Revillot, todos de la bancada de Juntos por el Cambio.

Monti les brindo a los tres hijos de la vecina, Amalia Cecilia y Daniel García y el resto de los familiares y amistades la bienvenida, tras lo cual se dio lectura a la ordenanza Nº 8894, promulgada el pasado 26 de marzo por el intendente Damián Biss.

La vecina homenajeada en este caso nació el día 14 de marzo del año 1950 en la Ciudad de Dolavon, como se mencionó tuvo tres hijos y cursó sus estudios primarios como pupila en el Colegio María Auxiliadora de Rawson, vivió en el campo con sus padres hasta casarse y se radicó en Rawson en el año 1967.

Cursó sus estudios secundarios en el turno noche en la Escuela N° 47.

Importante trayectoria

Con tan solo 22 años ingresó a la Institución Policial en el año 1972.

Amaba la Institución, era una mujer muy sensible, recta, honesta, respetuosa, trabajadora y responsable, su trabajo fue prioridad siempre, decía que era su sustento, pero también involucraba el honor de la familia y su apellido, con el permanente sueño y objetivo de lograr ser cada día mejor.

Inició su trabajo en la Dirección de Administración de Policía, cuyo jefe era el Doctor Contador Mayor Mercado,

Policía consideró necesario crear un Cuerpo Femenino jerarquizado, para lo cual convocaron a doce mujeres para realizar un curso de capacitación, las ascienden a Oficiales Subinspectoras, a Irma CONRAD, las Suboficiales María Rosa SERRA, María Cristina BARROS, Nilda HUGHES, Lidia GARALLETA, Julia BARBERENA, Silvia JONES, Lucia FERNÁNDEZ, Ana OWENS, Nancy CHOMÓN, Nely JUY y Ana María de Comodoro Rivadavia.

Fue designada como Coordinadora de la Oficina de Orden del Día, realiza su tarea y genera eventos sociales para la Policía.

Forma el Primer equipo de Vóley femenino que representa a la institución en los torneos de la Administración Pública Provincial, logrando el campeonato.

Cada 7 de diciembre, junto con la Oficina de Relaciones Policiales organizaba la cena aniversario.

Luego de varios años en el cargo de Jefa de Orden del Día es convocada a la Secretaría General y luego pide su traslado a la Unidad Regional Puerto Madryn, donde comienza una tarea comunitaria, involucrándose con temas sensibles como niñez, adolescencia y familia.

Crean la Comisaria de la Mujer, de la que se hace cargo y abordaban temas como violencia, abusos, maltratos, adicciones y otros. A los efectos de una mayor eficiencia en la tarea, forma una red de mujeres de distintos organismos estatales para intervenir en cada caso, fue una mujer con temple y cuando llegaban casos de mujeres o niños maltratados a la oficina, muchas veces le costaba contener las lágrimas y no involucrarse, siempre lo transformaba en un desafío personal. Poseía una sensibilidad social única, no podía dejar de involucrarse en esas problemáticas en busca de soluciones y bregando por su resolución.

Tuvo participación en casos de notoriedad que marcaron su carrera por la trascendencia social que tomaron.

La tarea de Irma no solo se circunscribía a la ciudad de Puerto Madryn, también en el interior de la provincia, sus necesidades y carencias pasadas en su infancia en Sierra Chata, la movilizaban.

Realizaba anualmente colectas solidarias involucrando a la comunidad en general, a los jóvenes de las escuelas secundarias tratando así de transmitir lo importante de la solidaridad con los más necesitados, logrando exitosas campañas. Con todo lo recaudado víveres, vestimenta, útiles escolares y golosinas, organizaba un viaje a Gan Gan con el Jefe de la Unidad Regional y personal que se fue sumando al padrinazgo de la Institución, acondicionaban todo, procuraban que los niños recibieran cosas que necesitaban por eso pedían con tiempo listados y le llevaban a cada niño de la escuela de Gan Gan, y a sus hermanitos que por cuestión de edad no estaba escolarizados aún, la alegría y felicidad, complementada por tortas, golosinas y música como corolario para esos pequeños que poco conocían de una vida plena de recursos, era la felicidad y la satisfacción del deber cumplido, era supremo.

Visitaba a cada vecino de Gan Gan y muchas veces encontraba juguetes entregados años anteriores atesorados como lo más preciado que tenían, gestos que fueron para ella inolvidables.

Cada etapa de su carrera forjada por el esfuerzo, la dedicación y realizó numerosas capacitaciones, cursos, foros, talleres, seminarios, congresos y recibió múltiples reconocimientos.

El más significativo fue el que recibió el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, donde es homenajeada con el premio “La Mujer Que Puede”…, eso era ella.

Agradecimiento

Concluida la lectura se hizo entrega de la copia de dicha ordenanza a sus hijos y Amalia en representación de ellos agradeció el reconocimiento del que fue objeto su madre y reiteró los valors que la caracterizaron.

La ceremonia concluyo con una serie de fotografías recordatorias de importante acto de reconocimiento.