¿Por qué todo el mundo habla de Ibai Llanos?
Todavía hay gente que hoy se pregunta “qué es Twitch”. Y es totalmente válido: es difícil comprender, si no se sigue el día a día, qué es esta plataforma que revoluciona la forma de transmitir en vivo.
Twitch es una plataforma para “streamear”. Streamer viene de “streaming”, que en inglés significa transmitir en computadoras, teléfonos o hasta televisores a través de una conexión a internet, generalmente en vivo.
Es decir: se usa internet para emitir un contenido que se puede ver en cualquier parte del mundo, en lugar de usar un cable o un satélite como suele usar históricamente la TV.
Por la facilidad que tiene para comenzar a usarlo, Twitch generó que mucha gente empezara a generar contenido de todo tipo: desde producir pequeños programas con entrevistados hasta un fenómeno conocido como “just chatting”, es decir, hablar con alguien o simplemente con los que miran la transmisión, que pueden chatear en vivo.
Si hablamos de todo esto es porque este martes Ibai Llanos, uno de los streamers más importantes del mundo hispanohablante, estuvo junto a Messi en su presentación en el PSG. Sí: junto a él. Al lado. Mientras la mayoría de los medios de comunicación tradicionales como, precisamente, la TV, se quedaban afuera.
Twitch comenzó siendo una plataforma para transmitir videojuegos. Es decir, jugar y mostrar el juego comentándolo “arriba” del contenido que se transmitía. Fundada por Justin Kan, fue vendida en mil millones de dólares a Amazon en 2014: Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo, se dio cuenta del potencial del negocio.
Esto sigue sucediendo en Twitch y es, de hecho, su pata más fuerte. Se transmiten no sólo juegos sino también torneos de videojuegos que mueven millones de dólares.
Muchos pronostican que el streaming va a “matar” a la TV, así como Netflix mató al videoclub o Spotify cambió la industria de las discográficas.
En realidad, de alguna manera, esto ya sucedió y algunos recién se empiezan a dar cuenta de que lo que ven como televisión tradicional no es sino el rastro de algo que, quizás, en unos años, tenga una forma totalmente distinta a la que conocemos hoy.